AVIVAMIENTO MUNDIAL
En la publicación anterior hemos dicho que estamos a las puertas de la segunda venida de Cristo; ya que, se han cumplido las señales anticipatorias de su venida; y que, en consecuencia, en los próximos días veremos la manifestación de la gloria de Dios y el último derramamiento del Espíritu Santo, tal como Dios anunció en la Biblia (Is 40.3-5; Hch 2:17-18).
Por lo tanto, en estos días Dios ha revelado que está visitando las naciones, preparando a la iglesia para que se lleven a cabo esos dos procesos gloriosos que acabamos de mencionar. En otras palabras, pronto veremos un avivamiento mundial.
TEXTOS BÍBLICOS
- “Ve, y reúne a los ancianos de Israel, y diles: Jehová, el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, me apareció diciendo: En verdad os he visitado, y he visto lo que se os hace en Egipto;; y he dicho: Yo os sacaré de la aflicción de Egipto” (Ex 3:16-17).
- “Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar” (Jer.29:10).
LA VISITACIÓN DE DIOS
1. PREPARACIÓN Y MANIFESTACIÓN
Pero, ¿qué es una visitación de Dios? Veamos: Una visitación divina es una obra soberana de Dios, a través de la cual Dios:
- desciende en una región,
- prepara el ambiente, llevando a la gente a la oración, al arrepentimiento, etc.; y finalmente,
- manifiesta su gloria, mediante el derramamiento del Espíritu Santo. Esto da origen a un avivamiento.
En la preparación de ese ambiente propicio para que el Espíritu Santo sea derramado, la iglesia tiene que colaborar, buscando a Dios, a través de la oración.
2. SECRETO
Entonces, un avivamiento es iniciado por una visitación de Dios en la que, el Señor:
- comunica su secreto, lo que quiere hacer, a sus siervos los profetas (Am 3:7);
- luego, la iglesia ora por el cumplimiento de lo que Dios ha revelado; es decir, pide que se haga la voluntad de Dios (Dn 9:2-3); y
- en respuesta a la oración, Dios obra (2 Cr 36:22-23).
Esto nos muestra que, Dios actúa cuando obtiene la colaboración de la iglesia.
3. DOS MOMENTOS
Después de considerar todo esto podemos decir que: Toda visitación de Dios, todo verdadero avivamiento, se divide en dos partes:
- 1) Etapa de preparación. La primera parte de una visitación es el tiempo de preparación, en el que la presencia de Dios desciende y lleva a un grupo de creyentes a orar o incesantemente, pidiendo que Dios derrame el Espíritu Santo.
- 2) Etapa de manifestación. La segunda parte de una visitación es el tiempo en el que el Espíritu Santo es derramado, y comienza el avivamiento, en donde hay milagros asombrosos, y las personas son salvas, sanadas, liberadas, etc.
Entonces, la visitación celestial inicia un proceso que termina en un avivamiento.
VISITACIÓN DIVINA EN EGIPTO Y EN BABILONIA
Veamos ejemplos de estas dos etapas.
1. LA VICITACIÓN EN EGIPTO
- “Ve, y reúne a los ancianos de Israel, y diles: Jehová, el Dios de vuestros padres, el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, me apareció diciendo: En verdad os he visitado, y he visto lo que se os hace en Egipto;;y he dicho: Yo os sacaré de la aflicción de Egipto” (Ex 3:16-17).
Note cuidadosamente que Dios dice que ha visitado a los israelitas en Egipto. La situación aún no había cambiado, porque todavía eran esclavos, pero la presencia de Dios ya estaba actuando, llamando a Moisés. Es decir, la visita de Dios fue en un tiempo de preparación.
Tiempo después, cuando llegó Moisés y ocurrieron los milagros, la liberación se hizo efectiva. Es decir, la visita celestial se manifestó en forma de liberación.
2. LA VISITACIÓN EN BABILONIA
Tal como sucedió en Egipto, lo mismo sucedió en Babilonia.,
- a. Profecía de Jeremías
A través del profeta Jeremías, Dios reveló que el cautiverio del pueblo de Israel en Babilonia duraría 70 años (606-536 a. C.).
- “Porque así dijo Jehová: Cuando en Babilonia se cumplan los setenta años, yo os visitaré, y despertaré sobre vosotros mi buena palabra, para haceros volver a este lugar. Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal, para daros el fin que esperáis. Entonces me invocaréis, y vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón. Y seré hallado por vosotros, dice Jehová, y haré volver vuestra cautividad, y os reuniré de todas las naciones y de todos los lugares adonde os arrojé, dice Jehová; y os haré volver al lugar de donde os hice llevar” (Jer 29:10-14).
- b. Daniel oró
Cuando los 70 años estaban por cumplirse, Dios “despertó” su palabra; es decir, le recordó al profeta Daniel que Jeremías había profetizado cuánto tiempo estarían en Babilonia. Por lo tanto, Daniel fue a revisar la profecía de Jeremías, y luego, buscó a Dios en oración para que se cumpliera su voluntad, y los librara de Babilonia.
- “En el año primero de su reinado, yo Daniel miré atentamente en los libros el número de los años de que habló Jehová al profeta Jeremías, que habían de cumplirse las desolaciones de Jerusalén en setenta años. Y volví mi rostro a Dios el Señor, buscándole en oración y ruego, en ayuno, cilicio y ceniza” (Dn 9:2-3).
- c. Dios contestó la oración
En respuesta a la oración de Daniel, Dios los libró.
- “Mas al primer año de Ciro rey de los persas, para que se cumpliese la palabra de Jehová por boca de Jeremías, Jehová despertó el espíritu de Ciro rey de los persas, el cual hizo pregonar de palabra y también por escrito, por todo su reino, diciendo: Así dice Ciro, rey de los persas: Jehová, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra; y él me ha mandado que le edifique casa en Jerusalén, que está en Judá. Quien haya entre vosotros de todo su pueblo, sea Jehová su Dios con él, y suba” (2 Cr 36:22-23).
Pero, si Dios había dicho que los libraría de Babilonia al final de los setenta años, entonces, ¿por qué oró Daniel? Daniel oró porque Dios actúa cuando, conociendo sus planes, su pueblo ora pidiendo que se haga su voluntad.
- d. Dos etapas
Veamos el nuevamente el texto bíblico:
- “yo os visitaré, y
- despertaré sobre vosotros mi buena palabra,
- para haceros volver a este lugar”
Notemos que, la visitación divina en Babilonia ocurrió en dos etapas.
- 1) Primera etapa: “y despertaré sobre vosotros mi buena palabra”
- En esta etapa Dios le recordó a Daniel la profecía de Jeremías; y en consecuencia, Daniel oró (etapa de “preparación”).
- 2) Segunda etapa. “para haceros volver a este lugar”
- En esta etapa el pueblo de Dios salió de Babilonia (etapa de “manifestación” del poder de Dios).
Todo esto nos muestra que, la visitación de Dios ocurre siempre en dos momentos.
VISITACIÓN DIVINA EN CHILE
Veamos un ejemplo de cómo una visitación divina dio origen a un avivamiento.
El propulsor del movimiento pentecostal chileno fue el Reverendo y Doctor Willis Collins Hoover Kurt (1858-1936); misionero y pastor de la Iglesia Metodista Episcopal.
Actualmente, este movimiento agrupa el 80% de la iglesia evangélica en Chile. Las dos denominaciones más grandes, la Iglesia Evangélica Pentecostal, y la Iglesia Metodista Pentecostal de Chile, reconocen a Hoover como el fundador de estas dos iglesias. [1]
1. ETAPA DE PREPARACIÓN
Veamos cómo comenzó la visitación celestial en Chile, poniendo hambre de Dios en los corazones y llevándolos a orar.
Hoover no sabía que, después de recibir la salvación, podemos recibir el bautismo en el Espíritu Santo; pero recibió dos noticias que le abrieron los ojos.
- La primer noticia. En su artículo “El avivamiento en Gales”, Hoover dio testimonio de que primero se sorprendió al enterarse del derramamiento del Espíritu Santo en Gales, en 1904. [2]
- La segunda noticia para Hoover fue la carta y el libro que su esposa recibió de Abrams, una antigua compañera de estudios, en la que ella le contaba sobre el derramamiento del Espíritu Santo en la India, en 1905.[3]
- Abrams, la misionera que ayudó a Pandita Ramabai, publicó en 1906 el libro “El bautismo en el Espíritu Santo y fuego”. En 1907 envió una copia de este libro a May Hoover, quien había sido compañera de clase en la Escuela de Capacitación de Chicago. Este librito llevó a que los cristianos en Chile quisieran tener el mismo bautismo en el Espíritu y fuego. [4]
Hasta ese tiempo Hoover creía que, con la justificación y la santificación ya lo tenemos todo; es decir, que no hay nada más que podamos recibir de parte de Dios. Pero por medio de Abrams se enteró que Dios quiere darnos el bautismo en el Espíritu Santo y fuego. [5] [6]
Conociendo el avivamiento que estaba teniendo lugar en la India, Hoover escribió cartas a los líderes espirituales en otras naciones, para averiguar más sobre este tema. Sus respuestas le mostraron a Hoover que había experiencias cristianas a las que aún no había llegado; y que, el avivamiento pentecostal fue de origen divino. Esto provocó hambre por más de Dios. [7] [8]
El 14 de enero de 1909, Dios le habló a un creyente de la iglesia de Valparaíso diciéndole que, hablara con su pastor, y que le dijera que reuniera hermanos espirituales para orar juntos todos los días, porque quería bautizarlos con lenguas de fuego. A partir del día 15 de enero de 1909, cinco hermanos comenzaron a reunirse todos los días, a las 5 p. m., pidiendo que la iglesia recibiera el derramamiento del Espíritu Santo.
En febrero de 1909, luego de una conferencia en la ciudad de Temuco, Hoover habló con los líderes de la iglesia; y ellos decidieron arrepentirse de todo corazón, para que el Espíritu Santo fuera derramado sobre ellos. [9]
Además de estas reuniones diarias en la casa del pastor, algunos hermanos comenzaron a reunirse todos los sábados, desde la noche hasta el amanecer. Durante siete semanas mantuvieron esas reuniones, hasta el 11 de abril, cuando dejaron de reunirse los sábados y comenzaron a reunirse los domingos, durante todo el día, a partir de las 7 a. m.
Entonces, el Espíritu Santo comenzó a poner convicción de pecado en los creyentes. A esto fue seguido por la reconciliación, la restitución, etc.
2. ETAPA DE MANIFESTACIÓN
Después de que los creyentes se arrepintieron de todo pecado y buscaron más de Dios, comenzó el avivamiento; es decir, la presencia de Dios se manifestó al ser derramado el Espíritu Santo.
Hoover dijo, en uno de sus libros, que el 4 de julio de 1909 hubo un derramamiento del Espíritu Santo. [10]
Como resultado de este derramamiento, los creyentes recibieron el bautismo en el Espíritu.
Esto llevó a los creyentes a confesar sus pecados, reconciliarse, arreglar asuntos pendientes, etc.
Además, hubo sanidades, profecías, visiones, los hermanos hablaron en nuevas lenguas, y salieron a predicar el evangelio.
Muchos visitantes que llegaron al templo, fueron convencidos de sus pecados, y se arrepintieron. La asistencia estaba creciendo mucho. [11]
El derramamiento del Espíritu Santo en la congregación de Hoover inicio un avivamiento a nivel nacional;y llevó a la iglesia a un crecimiento extraordinario. (12)
El avivamiento en Chile nos enseña dos cosas muy importantes:
- Así como el avivamiento comenzó cuando Hoover aprendió que había más en Dios que la salvación, leyendo sobre el derramamiento del Espíritu Santo en la India;
- del mismo modo, debemos comunicar que Dios tiene más bendiciones para darnos; escribiendo sobre lo que el Señor está haciendo en otros lugares.
SEA HECHA TU VOLUNTAD
Actualmente, Dios ha revelado que ha comenzado un nuevo tiempo de visitación celestial en su iglesia en todo el mundo. Como consecuencia de esto, el Espíritu Santo está poniendo hambre de Dios en el corazón de los creyentes, llevándolos al arrepentimiento de todo pecado, la búsqueda de Dios, etc.
Por lo tanto,
- considerando que Dios ha prometido manifestar su gloria y derramar el Espíritu Santo antes de la segunda venida de Cristo; es decir, en nuestros días; y
- sabiendo que el Señor actúa cuando la iglesia pide que se haga la voluntad de Dios,
- entonces, esto debe conducir a que:en todas las congregaciones cristianas,en todas las naciones, los hermanos se reúnan para pedir un nuevo derramamiento del Espíritu Santo y un nuevo avivamiento.
Dios ya ha iniciado el proceso que conduce a un avivamiento mundial, a través de su visitación. Si buscamos en oración el aceite celestial (Mt 25:1-13), veremos la gloria postrera. Amén.
FIN
AUTOR: Eduardo Pedro Saracchi. Profesor de Teología, graduado en Teología Pastoral. Iglesia Evangélica en Buenos Aires, República Argentina.
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CITAS BÍBLICAS. Las citas bíblicas de esta publicación han sido tomadas de la Biblia, Versión Reina – Valera (Revisión de 1960, RVR1960) © Sociedades Bíblicas en América Latina, 1960. Renovado © Sociedades Bíblicas Unidas, 1988. Utilizado con permiso. (Énfasis nuestro: Subrayados, negritas, aclaraciones, mayúsculas y cursivas añadidas).
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REFERENCIAS
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